Renunciar a la vida

En los países más avanzados, el suicidio es una de las primeras causas de muerte no natural. ¿Qué dice este hecho acerca de la vida contemporánea? La tendencia a describir la muerte voluntaria como la culminación de una enfermedad mental ¿no subestima la dimensión social de un fenómeno complejo? ¿Qué lugar debemos asignar al dolor en nuestra visión de la condición humana? Objeto de interpretaciones controvertidas y asociado a la idea de fracaso individual y colectivo, el suicidio es tratado desde la prudencia, pero también, todavía, desde el secretismo. Y sin embargo, pensarlo significa poner el foco tanto en los ángulos más recónditos de la subjetividad como en algunos rasgos de nuestra vida en común.

Para contribuir a ello, este ciclo de dos sesiones profundizará, en primer lugar, en el enfoque filosófico del dolor moral y en las miradas que Occidente ha dedicado al suicidio. En la segunda sesión, expertos y representantes de la sociedad civil debatirán los elementos vinculados a la prevención, desde los protocolos públicos hasta las conductas del entorno privado, pasando por las recomendaciones a las familias, la atención a los amigos y familiares que sufren una muerte por suicidio en su entorno más cercano, o el reto comunicativo que afrontan tanto los medios como el conjunto de la sociedad.