Visiones cinematográficas del tiempo

Toda obra audiovisual tiene una duración determinada que desde el principio la condiciona externamente. Un gran número de directores y realizadores han construido sus historias, independientemente de la duración final, con la intención de crear una temporalidad interna que conduzca el espectador fuera de los límites del tiempo real. 

Programa

60 seconds (Analogue), Christoph Girardet, Francia, 2003, 1’

«Sesenta fragmentos, cada uno de ellos de un segundo, imágenes de relojes de mano y de pared, tiempo lineal, espacio deconstruido. Si habéis visto el montaje de 24 horas de Christian Marclay, The Clock, podréis comprender que este pequeño trabajo de hace nueve años es la miniatura de la pieza extendida de Marclay. 60 Seconds (Analog) hace referencia al sistema lineal del tiempo y a su translación en números...» Matthias Müller, declaraciones recogidas en su participación en el congreso Xperimenta 2011 celebrado en el CCCB.

Ferment, Tim MacMillan, UK, 1999, 5’

Un lapso momentáneo nos descompone los acontecimientos de un breve fragmento de un dia cualquiera, en una plaza de una tranquila ciudad, gente paseando, niños corriendo, un anciano se sienta con su nieta en un banco. Él tiene un ataque al corazón y al caer al suelo, el tiempo se detiene. Viajamos lejos de la plaza y otro lado de la ciudad, por las calles, a través de los edificios, en las habitaciones y en los corredores, la captura de destellos de las personas y los fragmentos de sonido, tal como existen en aquel instante. . . Tim MacMillan desarrolló el efecto “time slice camera” en los 80s, efecto que se utilizó posteriormente en Matrix.

Ten minutes older, Herz Frank, Letonia, 1978, 10’

Una reflexión en género documental sobre el paso del tiempo a través de las expresiones de uno de los niños que se encuentra entre el público en una representación de marionetas. El niño expresa emociones, miedo, curiosidad, preocupación, tristeza, sorpresa, alegría. Sentimientos que se repetirán, y que reflejan lo que experimentará a lo largo de su vida. Este cortometraje inspiró los dos largometrajes Ten Minutes Older. The Trumpet y The Cello formados por cortos de quince directores internacionales.

Alumbramiento (Lifeline), Victor Erice, España, 2002, 12’49’’ (episodio de la película colectiva Ten minutes older:The Trumpet)

En un pueblo del norte de España en 1940. En la oscuridad, el llanto de un recién nacido rompe el silencio de la noche de un caluroso verano. Tras el ajetreo del parto, la madre y el hijo duermen profundamente. De repente, una pequeña mancha roja surge del pañal del bebé. Nadie se percata. La gente está ocupada con sus tareas y los niños están jugando... Victor Erice fue uno de los quince prestigiosos directores de cine invitados a participar en el proyecto Ten Minutes Older. The Trumpet y The Cello, que se realizó en 2002 como una reflexión sobre el tema del tiempo en el cambio de milenio.

Fire of Time (El foc del temps), Adam Cohen, EE.UU, 2000, 28’, VOSC

El final de un barrio histórico y obrero, el Barrio Chino (Raval) de Barcelona, una película sobre un lugar que ya ha desaparecido; una imagen posterior. Mientras el sentido del lugar se fragmenta, sólo el tiempo queda, y el tiempo se ha abierto camino… como el fuego. Todas las secuencias fueron grabadas en el Barrio Chino (Raval) de Barcelona y en el barrio de Brooklyn de Nueva York. El fuego del tiempo es una meditación personal sobre la memoria y el olvido, la historia y la entropía. Fue filmado en su comienzo con película súper 8 y se acabó de grabar en cinta de vídeo en enero del año 2000.

De l’origine du XXIè siecle, J.L. Godard y Anne-Marie Miéville, Suiza, 2000, 16’, VOSC

De l’origine du XXè siècle es un repaso de las imágenes que definen el siglo XX. Hacia atrás en el tiempo, se retrocede hasta 1900 a través de las citas cinematográficas y literarias. Como si se tratase de un collage, Godard trabaja a partir de un found-footage muy diverso: cine de ficción, efectos sonoros, imágenes de archivo de la guerra de la antigua Yugoslavia y de la Segunda Guerra Mundial, entre otros. El cineasta excava y opera sobre la memoria audiovisual y literaria del siglo XX para invocar la potencia del cine como instrumento histórico-social.