Oh! I Can’t Stop!

Al hilo de la exposición «Gameplay. Cultura del videojuego», esta sesión presenta un conjunto de películas experimentales realizadas en formato analógico en los años setenta, ochenta y noventa del siglo pasado en las que encontramos conexiones y resonancias con el imaginario, el ritmo o el lenguaje de los videojuegos, en aspectos que tienen que ver con la generación de espacios inmersivos, el punto de vista subjetivo o estructuras narrativas de repetición/variación. El frenesí y el nervio que caracteriza la experiencia de muchos videojuegos también se transmite en esta sesión basada en el movimiento acelerado y sus efectos en el cuerpo del espectador.